Twitter y Facebook son 2 Flechas de Cupido

Post sugerido por Mirsay Shimkevich @Mirsa ¡gracias colega y amiga!

¡Las Redes Sociales son armas de Cupido!. Cuando (como mínimo) entras a Facebook o Twitter, debemos confesar que después de ese momento nunca más somos la misma persona, deslumbrados sin reconocer o parafernalia por su fascinación y conociendo nuevas formas de actuar en un ambiente distendido y alegre, en el que todos hacen amistades con mayor o menor facilidad

Son planetas distintos al que conocemos (metafóricamente), llenos de príncipes/princesas o pinochos/líneas calientes, también hadas madrinas convertidas a veces en Cruela Deville o Pepe Grillos y Darth Vader.

¿Quiénes seremos cuándo sentados ante nuestro PC, como actores que salen a escena, tomamos el rol que mejor se acomode al momento?, optamos por variopintas características, conocimientos y profesiones cual chat de novatos con la rapidez del rayo.

Siempre somos bellos o muy dolidos, jamás aceptamos cualquiera de las frustraciones que nos acompañan a diario o las maximizamos.

Usamos apodos sugestivos; no queremos ser reconocidos en lo que quizás en nuestro interior se acerque más a lo que nos hubiese gustado ser.

Algunos explayan su alma expresando sentimientos, otros los más tímidos dejan salir al niño atrapado internamente a jugar y devorar horas compartidas con seres allende de los mares...tan lejos pero al mismo tiempo cercanos tejiendo mágicas redes de amistad y de amor algunas veces.

Percibiendo la química... esa magia de atracción manifiesta también en la red. Nos enganchamos a los amigos de tal manera que llegamos a sentir verdadero cariño por ellos interesándonos por sus asuntos personales y/o nacionales.

Las confesiones no tardan en salir, somos capaces con ayuda del anonimato compartir secretos íntimos jamás sacados de ese lugar...tan nuestro.

Hasta que un día el ciber-cupido, ¡ zasss ! nos lanza su flecha y...ahí vamos con la fuerza de un huracán devastador, que nos conduce al mar de las pasiones a veces desbordadas y otras no, pero pletóricos de ilusiones por haber encontrado una amiga, un amigo, un amante secreto, un confidente o un pana para hablar y beber sin mayor interés que ello, sin importar que uno viva en Caracas y otr@ en Barquisimeto y ambos con los pensamientos puestos en esos lugares, se dirán holas y adioses cada día entre el estrés de la oficina y las escapaditas al Twitter o Facebook por celular para enviar besos furtivos, deseosos de estar juntos, cuando el bendito trabajo …ése... que nos da de comer nos deja tiempo... nos lanzamos sin paracaídas a disfrutar aunque de lejos de esa grata compañía que son nuestros amigos de la red.

Cupido sabe que hay distancias, sabe que hay un gran margen de error y nos pone a prueba con el dolor de conseguir un alma afín tan distante y con una vida similar a la nuestra, en un ejemplo, dos líneas paralelas que se aman, pero que jamás tendrán un punto de encuentro.

Y para quienes están cerca no son todas las cosas ideales, porque el Twitter y Facebook les permiten saber que existen y cómo piensan, el principio de la empatía. Pero el amor es en persona, es allí la prueba real, la que una computadora o teléfono jamás podrá simular.

¿Se imaginan esos encuentros personales de parejas que se conocieron en las redes y que no se les puede colocar “me gusta” o tuitearlos?