Esta oportunidad llamada 29 de Febrero es un dÃa nuevo, extra, necesario, no sólo para el equilibrio del
tiempo como lo medimos los humanos. Es otro dÃa para vivir.
Hay quienes llegan éste dÃa, otros que se nos van. Y millones y
millones que lo vivimos sin recordar cuánto de bien nos hace, cuánto vale, que
es una oportunidad de ser y hacer más.
El chance de decirle a alguien que le amas, de presentar
disculpas, de escribir o arrancar ese proyecto de vida. Eso es todos los dÃas y
hoy que es uno adicional, más nos deberÃa impulsar.
Un dÃa extra para conseguir soluciones en vez de problemas, eso
deberÃa ser este dÃa.
Otro dÃa más en nuestras vidas para que la melancolÃa, el desdén,
el tedio, la apatÃa, se mueran.
Este dÃa nos hace tanta falta como al almanaque, porque es una
extensión de nuestra existencia, otro dÃa para demostrar quienes somos y para
qué estamos.
Nada estará más lejos con un dÃa adicional del año bisiesto. Al
contrario, sà actuamos, estaremos más cerca.
Hay quienes piden más tiempo, pues cuenten que poseen 24 horas
para activar las neuronas, las palabras afables, las acciones sinceras y
contundentes.
Imposible desconocer que las
horas nos traen cambios, en parte fortuito e inesperado y muchÃsimos bajo la
construcción de nuestras decisiones, acciones, palabras y movimientos
rutinarios o no.
O para qué negarlo: el dÃa se
construye también según lo determinen nuestros corazones, en el viaje de la vida.
Y asÃ, al término de éste dÃa, llegado por fin marzo, que cada dÃa
valga por igual pues es un nuevo dÃa que Dios nos dio y que la rutina no debe
volver la nada.
Que éste 29 de febrero de éste nuevo año bisiesto, te dé tantas
cosas buenas que mañana, pasado y siempre se multipliquen de más y mejores
formas.
Adiciona felicidad, resta desencantos, multiplica la esperanza,
resta a la toxicidad.
Argenis Serrano - @Romantistech
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