En siglos pasados, el hombre usaba tacones al
calzar, por estatus y tendencia. Ello de utilizar zapatos de tacón alto pasó a ser prioridad de las damas y lo
agradecemos.
Porque las damas son altas en su corazón, garbo,
inteligencia y elevan esa altura sin temor al que dirán.
Los zapatos de tacón de mujer son utilizados por las
damas bajitas no para que les vean altura ni por complejos, sino porque así lo
desean.
Nada más bonito que ver que la seguridad de la mujer
sea la que haga a la ropa.
Las damas altas, los usan para demostrar que para
ellas no hay límites, complejos ni medias tintas.
Las damas usan sus zapatos de tacón alto para
fiestas y así bailan, comparten, van de allá para acá. Y quizá haya cansancio
por su uso, pero siempre terminarán demostrando su pundonor y aguante, con la
discreción debida hacia su salud.
Para trabajar, pasear, fiestear o para lo que
gusten, bien merecido tienen este poema que deseo ofrecerles, por eso y muchas
cosas más:
Zapatos
de tacón alto,
para
acercarte a mi sonrisa,
más
soy yo quien da el gran salto,
al
universo que te cobija.
Soy
bajito junto a ti,
portando
o no tus tacones,
más
sé que nuestros corazones,
al
mismo tiempo gustan latir.
No
es medir lo que uno mide,
en
la forma corporal,
sino
la altura moral,
lo
que al final sí sirve.
Con
zapatos de tacón alto,
caminas
a ritmo seguro,
lo
sé porque al lado tuyo,
bien
camino acompasado.
¿Sabías
que como vistas,
igual
me vas a encantar?,
porque
la ropa es la nada,
sin
portadora formal.
Vayamos
pues por la senda,
que
queremos construir,
calzada
para paso seguro,
para
el estar, el ir y el venir;
pero
deja que contigo,
pasos
triunfales,
la
tierra llegue a sentir.
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