Es tiempo de
calidad,
El que da
significado,
A un día, que
marcará miles.
Riéndonos sin
malicia,
Del mal que se
hacen otros,
Con su actitud.
De reencontrar
ideas,
Entre las
asíncronas,
Y las que nos
unen.
De ver de tus
labios,
Salir el perdón,
Y el olvido.
De mirar en tus
ojos,
Una tranquilidad
sin igual,
Que siembra
futuro.
Tiempo de
calidad,
Donde se abren
caminos,
De saber y
sentir.
Donde la
seguridad,
De emerger con
poder,
Borra a la
incertidumbre.
De ver al
pasado,
En los cimientos
y enganches,
Que construyeron
nuestro hoy.
Alineando a las
ideas,
Como cuando los planetas,
Se enfilan en su
paridad.
Suspiros acallados,
Por ideas
trepidantes,
Firmes y
constantes.
Respeto al
máximo,
Cariño superior,
Soltura de
confianza.
Resquemores destruyéndose,
Al no hallar
asidero,
En nuestro firme
proceder.
Ideas al vuelo,
Tormentosas
algunas,
Pero seguro van
a llovernos.
Acciones al
ritmo,
Personalidades
distintas,
Objetivos bien
marcados.
Siendo como el
bambú,
Siguiendo
directrices,
Manteniendo
nuestras convicciones.
Cada día, un
reinicio,
Bañado de los
vestigios,
De lo que hemos
labrado.
Tiempo de
calidad,
Donde lo que nos
encontró,
Sigue vigente y
muy crecido.
Con cambios
propios,
De una
humanidad,
Que ha vivido
prístinamente.
Y cuando nos
distanciemos,
Por cuestiones
físicas,
Nada de lo
vivido será perdido.
Es el oasis del
pensamiento,
Del sentimiento e
hidalguía,
Donde hemos
reposado.
Sí no es
físicamente,
Allí volveremos
en nuestra mente,
Cuando
necesitemos un remanso.
El tiempo de
calidad,
Es aquel que se
queda por siempre,
Como tú, en mí
corazón.
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