Vas por la vida siendo
como una hermosa canción de amor.
Serena y digna,
brindando a la ciudad, honor.
Abres tus ojos y
pareciera que cantara la voz de la esperanza.
Esa tan divina que
invita a amar en paz.
Si hubiere más personas que fuesen iguales
a ti, ¡qué maravilloso sería vivir!
Sin perder
personalidad, pero teniendo esa esencia que haría al mundo feliz.
Iguales a ti como un
lugar para retozar y miles de estrellas mirar.
Una vivencia especial,
que invita a sonreír y a sentir, bien pensar y apreciar la belleza de amar.
Sea a una flor, un
bebé, su labor o una acción sin igual.
Que dé luz y enseñe a
vivir sin mentir, desdeñar ni sufrir.
Porque existen miles verdades, valiosas las que al contemplarte conocí; sé que tendría mi tierra gozo de nuevas bondades, si muchas más fuesen en el mundo, iguales a
ti.
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