El pasado en exceso
Causa tanta nostalgia, anhelos,
suspiros,
Que si no se llegan a controlar,
Pueden deprimir en demasía
A los momentos gratos,
Los aprendizajes más nobles,
El valor real de las personas,
La captura de los momentos,
El juramento de quién no y quienes,
sí.
El presente en exceso
Puede atosigar en vez de
enriquecer,
Debilitar el cuerpo de manera
silente,
Roba suspiros sin querer,
Adentrarte en un limbo que llamas rutina,
No ser tu compañía, sino tu
contrincante,
Rescatar los puntos cruentos del
mundo,
Obviar lo maravilloso de cada día,
En exceso de confianza que sí no se
controla,
Se escapa y desenfrena.
El exceso de futuro
Causa ansiedad irremediable,
Un habitar en el futuro sin
organizar el presente,
Un juego de ajedrez sin piezas a
favor,
Te desgasta cuando ni siquiera has
partido,
Te hace creer que tienes todo el
control,
Pero te está desbocando en este
instante,
Siembra dudas en vez de esperanzas,
Te aburre sin haberle tocado.
En exceso sólo se puede tener
Realidad, control y paciencia,
Estudio, organización y
estrategias,
Certeza que cosas adversas pueden
pasar,
Seguridad que mientras más bien
hagas,
Más el cielo y tus acciones te
redimen,
En exceso puedes tener sonrisas,
Besos, te quiero y caricias,
Comprensión, tolerancia y hasta las
siestas,
Que te recompensen el trabajo y las
fiestas,
Ahorro, inversiones y buenas
compras,
Sin tener todos los huevos en una canasta.
En exceso puedes tener fe en el
bien,
Aunque el mal demostrar su punto
quiera.
En exceso las lecturas, los juegos
y los bailes,
Los cantos, paseos y ayudas
sociales,
En exceso puedes tener constancia
laboral,
En su justo balance, entre el tener
y el dar.
Sólo así el pasado será lo grato,
El presente será un buen regazo,
El futuro será tu propio legado,
Y en exceso te dirás,
¡Vida mía, por mí, lo he logrado!
Argenis Serrano
“Pensamos demasiado y sentimos muy poco”.-
Charles Chaplin
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