sábado

Salarios en Pareja

No dejaremos de insistir que pareja significa “ir a la par”. Y eso incluye a los salarios en pareja, sea que cobren el mínimo de venezuela, el concertado de estados unidos o el salario medio en madrid.

Mucho se ha hablado de que “cuando un hombre se vale por sí mismo y gana buen dinero con su salario justo, se esmera por darle de todo a la mujer que ama; pero cuando la mujer se vale por sí misma y gana buen dinero con su sueldo básico, todo es para ella”.

Ciertamente hay muchos casos así que no es que mal pongan nada más a la mujer, sino que indican que allí no hay una verdadera relación de pareja.

Incluso en el matrimonio civil se dice que “le amarás, cuidarás y respetarás en la salud y la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, etc.”, lo cual no sólo son cuidados de enfermera/o, sino de ser toda una cooperativa donde las cargas y los dividendos, sean en partes iguales.

salarios en pareja

Los salarios en pareja

Afortunadamente, existen muchas personas que en las redes sociales han emprendido cruzadas para enseñar el cómo debería ser una estrategia equitativa y cualitativa para que los salarios en pareja rindan, sean proporcionales a lo que se devenga a la hora de los pagos y los ahorros y que active la colaboración y cuidado muto que no debería tener ninguna traba, en especial por algo que al final es en extremo banal: el dinero.

También existen páginas web como SalarioJusto.com donde no sólo muestran cuánto se gana en los distintos países, sino cómo distribuyen ello para satisfacer sus necesidades básicas, necesidades impuestas y gustos, aunado al ahorro a futuro.

Ya que tanto se quiere copiar el estilo de vida de países que pertenecen al primer mundo que en el cual los salarios en pareja son una suma de responsabilidades y disfrutes por igual, brindando la calma, solvencia y dignidad que el trabajo fecundo y creador debería aportar a todos nosotros.

Vean salariojusto.com y contemplarán la distribución de los sueldos en pareja. Donde la comida, el alquiler, los servicios básicos, transporte, salud y alimentación se priorizan y no son un dolor de cabeza, en especial porque sea cual sea su profesión u oficio, ambos le echan muchas ganas para ser solventes, lo que es una manera de calma. Ya la felicidad verdadera, se la abastecen ellos con su amor mutuo.


Los tiempos cambian

Ya los salarios en pareja son normales y el paliativo para aguantar los embates de la inflación y la escasez en muchos países. Quedó atrás eso de que el hombre trabajaba y proveía y la mujer cuidaba la casa y compraba a la medida.

Están iguales en el deber de cuidarse mutuamente y para eso, requieren trabajar y proveer. El cálculo justo de ambos salarios para cubrir lo más amplio del espectro de necesidades y/u obligaciones, permite que también, con sus sueldos, puedan darse ese gusto independiente o individualista, que se tiene por el simple hecho de ser humano y tener personalidad, libre albedrío y gustos propios.

Comprarse algo con su salario, no debe ser objeto de molestia o trastocar a la economía del hogar. Porque para eso, se trabaja.

Quienes se aman de verdad, saben salir de cualquier atolladero, no juzgan ni se molestan o se sienten avergonzados o mezquinos. Un gusto de vez en cuando, jamás hará daño.

Lo que deben recordar es que el salario en pareja permite ampliar el espectro de oportunidades y disminuir los efectos negativos de las recesiones, carencias o problemas que surjan.

La mezquindad es un atributo de quien no ama. El cuestionamiento despiadado de cualquier gusto, sin tomar en cuenta el esfuerzo anterior y los méritos o necesidades, es muestra de que no se merece el amor que recibe.

El dinero no hace la felicidad, pero se necesita para cubrir lo material o tangible. Los salarios en pareja se encargan de eso.

El respeto, valoración, comprensión, equidad y lucha codo a codo por sus objetivos, sí que crean parejas felices y eternas.

Argenis Serrano 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entradas populares